domingo, 23 de agosto de 2009

Aplausos

Si el hombre evolucionara y en lugar de respirar tuviera que aplaudir los mexicanos seríamos los primeros en adaptarnos. Acepto que hay sociedades que abusan del aplauso, pero los mexicanos no nos quedamos atrás.

Aplaudimos por todo: cuando empieza un acto, cuando sale a escena el actor, cuando acaba el acto; cuando llega el conferencista, cuando se para, cuando hace un chiste y cuando se sienta; cuando inciamos cursos, cuando los terminamos; cuando alguien se casa, cuando alguien cumple años, cuando alguien dice algo chistoso; cuando vemos la tele, cuando leémos el periódico, e incluso, (y juro que me ha pasado) cuando aterriza un avión.

Sobreabusamos del aplauso. Hasta donde yo entiendo el aplauso es una celebración de algo que nos emociona. O bien, somos demasiado positivos o todo nos sorprende.

Por ello, si aplaudo lo haré cuando algo realmente me emocione, por lo demás, dejo que otros lo hagan por mí. 


1 comentario: