jueves, 29 de abril de 2010

abril


Abril comenzó un poco antes. Empezó con un beso. A este le siguieron otros, pero el primero fue el que bastó. Fue una explosión de sentimientos reprimidos, guardados por los dos. La verdad expuesta como nunca antes lo había estado, como ya casi no lo estuvo. Fue suficiente también para complicar la historia, complicar la verdad. Semanas más tarde ello se haría evidente y trajo consigo consecuencias confusas. Arranques de racionalidad manzana o de irracionalidad lechuga.

Fue un mes de sentimientos. Los viví lejos de casa y tan cerca de ella. Hubo un maravilloso viaje con compañía, sin compañía. Uno de esos viajes que se guardan para siempre, que significan algo. De momentos azules y amarillos.

Hubo también el alcance de un propósito. Otra vez en el sur. Ahora en el sur rupestre donde las desigualdades son más evidentes, más lastimosas. A pesar de ello o sin tomar en cuenta ello, un paso más en el camino. Más serio, más concreto, más contundente. La posibilidad directa de hacer las cosas como se deben y de llevar la ciencia en la que creo al lugar donde trabajo. Confianza plena en mí y en lo que hago. Signos de consolidación que dejan de un lado la idea del idealista y se transforman en las del operador.

Este mes se cumplieron seis. Después de tanto tiempo seis meses son muchos y tan pocos a la vez. Se siente bien no tener más humo. Se siente mejor saber por qué.

El mes no termina como empezó. Termina raro. Triste. Pero tampoco termina certero o con certeza. Hay cosas que simplemente son tan fuertes que ni la voluntad o la falta de ella pueden liquidarlas.

Síganle....


Hay gente que es muy buena en lo que hace y tiene un talento superior a quienes los rodean. Hay quienes no. Odio cuando los primeros y los segundos lo creen o se lo creen. Lo odio no por lo que dicen, sino por lo que dejan de hacer.

Esta semana lo he vivido. Corregir las fallas imbéciles de un tipo que por desidia no hace las cosas como debe. Puedes estar por encima de los demás; puedes no estarlo; el problema es que lo creas. Sigan con sus errorcitos babosos.

miércoles, 28 de abril de 2010

oddities

Hay cosas que no entiendo. Muchas. La vida está llena de contradicciones. Las tragedias más grandes y las alegrías más profundas se fundan en ellas.

La única contradicción en la que yo descanso es que, a pesar de todo, sigo siendo yo. Creo en lo que creo. Me la juego por vivir, por sentir.

sábado, 24 de abril de 2010

730 días

Jorge Drexler - 730 días

"A la sombra de tu luna .... se acunó mi corazón"

Sí, sí es la misma.

viernes, 23 de abril de 2010

sobre ello, sobre mí

La vida es lo que sientes; los minúsculos impulsos que pasan por tu cabeza y llegan a convertirse en estruendos incontrolables de sentimientos y sensaciones. La felicidad plena y pura, el dolor lacerante e insoslayable.

Hoy, dos días después, puedo decirlo con toda certeza, y supongo también con el dolor que eso conlleva: nunca en la vida había sido tan feliz como en los pasados dos meses y medio.

Nunca fui tan pleno, tan consciente de mí mismo y tan ingenuo de los bemoles que todas las causas externas pueden producir. Estuve sumergido en un letargo que sólo me dejaba vivir mi día, cada uno de ellos. ¿Para qué hacerlo de otra manera? En un cambio sustancial en mi vida, decidí vivir cada día, sólo cada día. Maravillosa fórmula que logró traerme calma y también, quiero pensar, transformar, aunque fuera por poco, una visión en alguien más.

Cada instante fue una fabulosa odisea. Desde el más mínimo detalle en sincronía hasta el abrazo más profundo y duradero. Las sonrisas que vinieron de un chiste y las que vinieron de un sentimiento. La sensación de compenetración, de suficiencia.

En ese estado mis sonrisas se potenciaron, por mí y porque pude, aunque brevemente, ser lo que necesitó; darle el tiempo, la calma y el aliento que no le habían dado. Más allá de mí, eso por sí mismo me hacía feliz…verla feliz a ella.

Fui feliz, como nunca.

jueves, 22 de abril de 2010

miércoles, 21 de abril de 2010

martes, 20 de abril de 2010

6 meses


¿Quién lo hubiera pensando?
Hay cosas mucho mejores en la vida.

domingo, 18 de abril de 2010

Night Time


Los tags años después

Hace pocos años decir "may it please the Court" significaba la forma más vigorosa de entender lo que pretendía que fuera mi profesión. Hoy, estando tan cerca del "con su venia señor Presidente", vivo lo que en anhelos pretendía que fuera más que un juego.

Sin duda estoy cosechando muchas cosas buenas. Sin embargo, mi verdadera alegría radica en que ahora tengo el espacio - y hago uso de él - en el que puedo aportar a mi país lo que construí con tantos; lo que en tantos creémos. La firme convicción en la coherencia normativa y la práctica de la ciencia.

Irónicamente, al final de cuentas, todo sigue siendo un juego en el que religiosamente escucho Common people antes de una audiencia o traigo puestos mis tags al preparala.





sábado, 17 de abril de 2010

Peruvian kitsch


No son aislados los comentarios que han salido de mi boca que denotan, por decir poco, hostilidad hacia los peruanos. La gente cercana a mí los conoce sin duda. Ellos parten de una premisa única y fundamental: los peruanos son rupestres.

Numerosos ejemplos de ellos pueden ser vistos en la forma que se lleva a cabo su política interna o sus "artes". Es de todos conocidos el tristísimo programa Laura en América y otros ejemplos igual de funestos como la Tigresa de Oriente.

Esta vez tuve la oportunidad de llevar a cabo un estudio empírico para comprobar mi tesis y éstos son algunos de los resultados:

1. Aeroméxico utiliza sus peores aviones para volar a Perú. LAN los mejores que tiene para volar a México.

2. El primer ejemplo femenino peruano que vi fue aquélla que se subió al avión con una playera muy escotada de lentejuelas, oliendo pésimo, y con un sombrero charro rosa, puesto en la cabeza.

3. La forma migratoria peruana tiene como fondo la imagen de toda Sudamérica y no la de Perú. Señala como motivos distintos para ingresar al país los profesionales de los de "trabajo".

4. La declaración de aduana está totalmente redactada en inglés, pero tiene dos leyendas en español que preguntan si el que escribe entiende lo que está respondiendo.

5. Los choferes de las representaciones diplomáticas tienen libre acceso en los aeropuertos. Pueden llegar a recoger a sus invitados antes de pasar migración, incluso.

6. En el lugar en el que se recojen las maletas, antes de salir del aeropuerto, hay vendedores y gente que renta celulares.

7. Los taxistas se pelean a la gente para llevarla a su destino.

8. A la pregunta sobre quién tiene preferencia entre el conductor y el peatón, la respuesta es inequívoca: el que gane.

9. Al señalar los lazos entre México y Perú suelen dar ejemplos como que a la muerte de Cantiflas se decretaron tres días de luto nacional o que Chespirito fue condecorado por el Congreso.

10. Una provincia se llama Madre de Dios.

11. Hay señalamientos de tránsito rotulados a mano.

12. Toda la música suena a la Tigresa de Oriente.

13. En serio, manejan como animales.

Todas estas razones los hacen por sí mismos rupetres. Tal vez en una forma jocosa.

Sin embargo, lo que verdaderamente los hace rupuestres es el profundo sentimiento racista que existe entre sus habitantes. La total y evidente segregación que forma parte del día a día peruano.

Ello es aún más triste cuando hay que quien oprime y quien se deja oprimir y ambs entienden su rol como tal. En la situación más irrelevante, pueden verse claramente estas obsesiones por la jerarquía entre unos y otros, por más que no haya una verdadera diferencia entre los mismos.

De broma siempre había dicho que lso peruanos eran rupestres por razones que al final de la historia resultan irrelevantes. Lo son porque no se entienden como pueblo y tratan ellos mismos de destruir esa noción.

Censo

¿Por qué nos contamos? ¿Acaso el asombro por saber que somos más de 100 millones de paisanos es motivo suficiente?

Recuerdo desde muy pequeño el logotipo del censo nacional; el del monito y la casa. Más allá de eso, nunca me había preguntado para qué sirven los números que arroja ese conteo. Ahora que me lo he cuestionado me ha surgido otra pregunta: ¿Los resultados se usan para algo?

Aunque pocos, últimamente han habido comerciales en radio y televisión que resaltan el hecho de que 100,000 mexicanos nos contarán a todos. Si eso es lo único que hay que resaltar, ¿por qué siquiera hacerlo? Si no hay otro fin, 100,000 mexicanos serían una muestra representativa de cualquier población, por lo que sólo bastaría con registrar su características.

Estados Unidos también realizará su censo este añó. La dinámica es distinta. A diferencia del número infinito de preguntas que incluye el censo mexicano - como las relacionadas con el número de focos en una casa - el estadounidense sólo incluye 10. Por otra parte, en el censo estadounidense la gente debe enviar por correo sus repuestas y no son 100,000 o más gringos las levantan.

También hay otra diferencia sustancial. La publicidad del censo estadounidense trata de justifica y explicar la necesidad del mismo. Con anuncios que se preguntan "¿cómo sabemos cuántas aulas de clase necesitamos, si no sabemos cuántos alumnos hay?" o "cuántos vagones necesitamos, si no sabemos cuántos usan el metro?" el censo estadounidense, al menos, pareciaera indicar su significado.

No sé si debiéramos adoptar un enfoque así. De mientras.....

¡Arriba nuestro censo! ¡Sabremos cuántos mexicanos somos! ¡Qué importa que no sepamos de que nos sirve saber eso! Al fin, como dice el comercial: "en México contamos todos."

sábado, 10 de abril de 2010

Castillo Petruzzi road

Me voy a las tierras de los tiraditos, el pisco y los jueces encapuchados. Al lugar en el que la irracionalidad rupestre dio muestras de creatividad absurda. El Chino y Vladi haciendo de las suyas mientras Laura, la de toda toda América, los agasajaba.

Llego cerca de la Cantuta y de Barrios Altos a hacer lo mismo por los que se les conoce, pero del otro lado. De nuevo llevo al Estado en la espalda. Ahora, tristemente, con una visión más realista de lo que se avecina. A pesar de ello, no menos optimista por aplicar lo que a mí me interesa aplicar.

A defender la ciencia jurídica y no las radionovelas.


Circuit Breaker

Röyksopp - Circuit Breaker

viernes, 9 de abril de 2010

NY (random chronological thoughts)


4 a.m. Pésimo café. Eso no será suficiente para cambiar la expectativa. No hoy.

Odio Hartsfield y la vehemencia negroide que le imprime a Delta. Otra vez jugué fuercitas con ella. Le gané. Bueno, no perdí.

Transoceánica sin oceáno, sin melancolía; con emoción. Primera vez en un avión.

Llovizna punzante en la cara. Ráfagas de viento helado de bienvenida. Estoy en Nueva York.

Inesperado comienzo. Eterna espera; más de un día. Mucho. Felicidad plena. Nunca antes así.

Normalidad realista. Gozosa presencia. Caminata con y sin rumbo, con y sin agenda. La mejor manera.

Volado. Donde con la cabeza perdemos lo dos. Terca necesidad vacía.

Camino tras caminar. Encuentro una cara familiar que pudiera despejar la mente mientras la hora marcada llega.

La calma que Rothko me inunda no puede superar la desesperación de Pollock. But, then again, there is no such thing as perfect despair; though I wouldn't recognize it.

Caminata de horas a la luz del que no será el día. Murakami en el parque postrándose ante mí como la única alternativa. Beautiful Day Without You engalana el regreso a la casa provisional.

Chelas en espera de nada. Una tertulia acostumbrada ahora en paralelos distintos.

Yes! Shopping time! I don't care!

Llega la tercera generación y yo tan lejos. La felicidad de ser tío y de que Ponchito ya arribó.

Enough is enough o el intercambio de un croissant por una hamburguesa o viceversa.

Maravillosa tranquilidad metálica. Trémulos rayos de sol anunciando que el final del día está cerca. Otro sin ella.

Y esa tranquilidad metálica sólo se ve interrumpida por una visión en amarillo. El último suspiro del día ahora con ella. Un instante que lo vale todo. Una verdad fabulosa. Cena que confirma el gozo; caminta que lo exacerba. Feliz.

Japón en tinta y en lana; muchos kilómetros al este. Anfield en Nueva York, pasando por Edimbrugo, sin dejar atrás a uno de los padres de la independencia. No Italia, sino Estados Unidos por México. La ida al baño más cara de la vida.

La mesa y la calabaza. El hoy y la calma con la que se ostenta. Despedida que no sabe a despedida. Sensación que no puede describirse.

Mensajes nocturnos despierto. Calor de otros lugares. Despierto temprano esperando encontrar el mar, la arena en otro contexto. La noche ha sido larga en mi cabeza.

La madera cruje mientras los más de noventa años del vagón le pasan por encima. Sendos señores de caireles pasan cuando sus réplicas juegan a mover la arena. El frenesí de la ciudad se detiene un instante en un lugar que pareciera ser tan lejano. El mar parece ser otro y sin embargo sigue siendo mar. Pretexto de recuerdo de los días que acaban de pasar.

El sol lacerante mientras la brisa helada le miente. Dormito en la playa; muy distante de lo que entiendo como tal. De nuevo el caos turístico.

El acordeón del norte, mucho más a norte, me recuerda a casa. Tonadas familiares de los que ahora están acá, haciendo algo que podrían hacer allá. Aquí la gente da una moneda por curiosidad; allá, tal vez, voltearíamos la mirada por cotidianidad.

Cielito lindo es entonado con un sax por un no digno de hacerlo. Se burla de Frank Lloyd Wright y su edificio de vasija.

Comienza ya a mermar el cansancio y la idea de regresar para sólo irme de nuevo.

Guadalajara en Nueva York. Sea cerca o lejos, las Chivas y su pasión. Pina gol. Gran manera de cerrar una gran semana.

Mañana es el último entero. Se siente como tal. También, debo decirlo, estoy satisfecho.

Después de cumplir con mi capricho descubro un lugar en el que se supone debía haber estado. Pido un pedazo de pizza; me siento como si estuviera acompañado.

Una ostra recomendada para la cena. Un encuentro casual en el camino. Curiosa despedida de la ciudad.

El que dice que no compra pero luego no puede cerrar la maleta...

Tiredeness fuels... missing home; cautious of what it's to come.

Gracias D. Un viaje así difícilmente habría sido posible sin tus atenciones.

Me voy. Dejo la ciudad caótica, mágica, aplastante. Me voy con la sensación de que ahora es mía. Aquí estará por siempre, al fin, una parte de mi historia.

What a city!!!